Sam Edelman es el dueño de una sucursal de Kentucky Fried Chicken y está convencido de que merece una estrella Michelin. “Técnicamente cubrimos los requisitos, así que vamos a ver qué pasa”, menciona Sam, cuyo restaurante se encuentra en un área remota de Australia. Para llegar a oídos de los críticos gastronómicos creó un grupo de Facebook llamado “Kentucky Fried Chicken deserves a Michelin Star”. Aquí sus razones.
La guía Michelin es una publicación anual que evalúa restaurantes alrededor del mundo utilizando un sistema de estrellas. Son tres niveles que hacen alusión a un viaje por carretera, el primero se refiere a lugares en los que “conviene detenerse”; el segundo a sitios que “valen el desvío de ruta”; y el tercero, es para establecimientos que “merecen un viaje especial para conocerlos”.
“Nuestro restaurante es el más remoto de la cadena de KFC. Tenemos clientes que viajan cientos de kilómetros para comer aquí”, declara Sam. Pero, ¿cómo surgió esta idea? Fue gracias a Netflix, específicamente un capítulo de la serie Street Food en la que mencionan que el puesto ambulante de Jay Fai obtuvo en el 2017 una estrella Michelin.
Lee: Los waffles que están volviendo loco a Estados Unidos
Sin embargo hay un problema con el plan de Sam, la guía Michelin no incluye restaurantes australianos en sus evaluaciones. ¿Tú qué opinas?